7 Estrategias de dinero para emprender exitosamente
Los emprendimientos requieren de aprender varias habilidades, una de ellas es el manejo del dinero. No basta con tener una gran habilidad técnica dentro del negocio, ya que el producto o servicio que se venda, simplemente es una parte más del negocio. El hecho de no emplear estrategias de dinero para mantener y hacer crecer el negocio, puede estancar tu emprendimiento y hasta llevarlo a la quiebra.
En este artículo hemos recogido las 7 estrategias de dinero para emprender que han utilizado emprendedores exitosos por todo el mundo.
1. Consigue algo que te importe más que el dinero para mantenerte motivado
El dinero es una forma de medir la eficacia de las estrategias de tu negocio, pero no puede ser el enfoque principal del mismo. No es frecuente la abundancia de dinero en el inicio de los emprendimientos, al contrario, la falta de dinero es lo más frecuente. Cuando comienzas un negocio es necesario desarrollar algunas habilidades como el manejo de la frustración, la resistencia al trabajo sin horario, la automotivación diaria, el enfoque a la acción, etc.; la ausencia de dinero es precisamente lo que te ayudará a desarrollar estas habilidades.
Una excelente meta podría ser “conseguir un ingreso de 1000$ al mes vendiendo el mejor café”. Obsesiónate por hacer el mejor café, conseguir los mejores proveedores del grano más puro, procura el mejor aroma, encuentra el mejor punto de venta, crea los mejores productos con café. De esta forma, los 1000$ se convierten en una medida de éxito, pero no en tu obsesión diaria.
2. Cuenta con palancas financieras para el flujo de efectivo
El flujo de efectivo es lo que mantiene la actividad diaria de tu negocio, es con este dinero que pagas a los trabajadores, a los proveedores, compras materia prima, pagas servicios, etc. Por eso, cuenta con estrategias de negocio que te permitan apalancar el flujo de efectivo que necesitas, por ejemplo:
Paga con el dinero de tus clientes, esto te hace establecer un sistema a través de cual tu negocio trabaja con el dinero de tu cliente y no que te conviertas en su banco.
Mantén los inventarios bajos para que el dinero no esté parado, principalmente en productos de difícil salida.
Utiliza créditos rápidos para los imprevistos y para salir de los apuros cuando el flujo de efectivo falla. Estos tipos de créditos se aprueban muy rápidos y son más convenientes que tener ahorros (dinero parado) para imprevistos.
3. Al principio invierte en investigación de mercado
Las personas que comienzan un negocio suelen invertir al principio en la mejor computadora, en programas, en equipos e inmobiliarios sin haber probado su mercado realmente. Primero necesitas asegurarte de que alguien está dispuesto a pagar por tus productos y servicios, estas mismas personas te ayudarán a pivotear tu negocio si es necesario. Todo esto requiere inversión de tiempo y dinero, por eso, crea prototipos de productos y servicios con equipos y herramientas básicas. Esta es una etapa de austeridad absoluta.
4. No detengas tus ideas por falta de dinero
Una de las escusas más comunes al momento de emprender es la falta de dinero. Pero esto es solo eso, una excusa. Realmente no emprendes por inseguridad, por miedo, por falta de autoestima, por no tener la mentalidad adecuada, pero no por falta de dinero. Podría afirmar, incluso, que emprender sin capital es posible. En el artículo “7 fuentes de financiamiento para emprender” puedes leer cómo financiarse un emprendimiento con poco dinero donde el autofinanciamiento entra como una propuesta perfectamente válida y hasta necesaria cuando te inicias.
5. Desarrolla tu modelo de negocio antes de pedir financiamiento
Uno de los errores de los emprendedores es pedir dinero para desarrollar sus ideas antes de crear su modelo de negocio. Hasta que no sabes cómo interconectar todas las partes de tu negocio de forma estratégica no tienes un modelo de negocio. Para probar como interconectarlas tienes que recorrer un camino de ensayo y error, hacer investigaciones, darte cuenta con qué tipo de estrategias te sientes más identificado, qué de lo que busca el mercado puedes ofrecerlo con ventaja competitiva, etc.
En esa primera etapa invertirás dinero que es posible que pierdas o no recuperes de forma rápida. Si tú mismo no inviertes en esa primera etapa ¿por qué un tercero sí lo haría?, al menos de que sea un socio de tu negocio tiene mucho que perder.
Una vez que encuentras interconectar las ideas de tu negocio es más sencillo expresarlo en un modelo de negocio. Ya sabrás cómo producir tu producto o servicio, atraer prospectos, convertirlos en clientes, entregar tus productos, cómo cobrar y cómo pagar. Solo después de que has hecho esta tarea es cuando estás preparado para ser más efectivo con el financiamiento de terceros.
6. Verifica que tengas un negocio rentable y escalable
Existen muchos negocios rentables, pero menos escalables, por eso, estos dos conceptos son importantes tenerlos claros para leer nuestros estados financieros. Un negocio rentable es aquel que logra cubrir costos y gastos con los ingresos que se obtienen y que además logra dejar ciertas utilidades para el negocio. Un negocio escalable es aquel que, valida la existencia de una alta población dispuesta a comprar nuestros productos y servicios, y que, además, contamos con un sistema automatizado para atenderlas.
7. Preocúpate por tu educación financiera
La educación financiera es lo que hará que cada día manejes mejor tu dinero. Ten en cuenta que la educación financiera es amplia, te educas cuando contratas a un contador para tu negocio y aprendes de él. También lo haces cuando solicitas créditos y aprendes de las circunstancias o cuando te inscribes en un taller o en una conferencia con gurús de las finanzas. Otro tipo de educación financiera es cuando te inscribes en cursos que te ayudan a desbloquear formas de pensamiento que te alejan del dinero. Emprender por sí solo, es una experiencia educativa en muchos sentidos, incluyendo las finanzas.