
¿Qué aporta a las empresas un buen clima de salud laboral entre sus empleados?

Los datos de la OMS son claros, aproximadamente 280 millones de personas en el mundo tienen depresión, y muchas de estos casos se producen por cuestiones muy vinculadas al entorno laboral.
Es la propia OMS la que define qué es la salud mental, un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solo la ausencia de afecciones o enfermedades. Esta definición fue ampliada en el año 2001, y en ella entró un concepto interesante, la capacidad de hacer frente al estrés normal de la vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a la comunidad.
Con esta nueva nación sí resulta muy estrecha la relación entre salud mental y el ámbito laboral. Para las empresas, ofrecer un ambiente de trabajo donde los empleados se sientan cómodos y puedan gestionar sus actividades diarias es clave. De ello depende en gran medida la productividad.
¿Por qué es importante la salud mental en los entornos laborales?
La atmósfera en el empleo y el modo de gestionar el trabajo influyen directamente en la salud mental de la plantilla. En muchas organizaciones los trastornos mentales son un problema de salud muy común, y esto obliga a las empresas a asumir un rol activo y promover acciones eficaces en el lugar de trabajo.
Un buen clima de salud laboral se asocia a resultados económicos positivos, menor índice de conflictos, un mayor grado de satisfacción entre empleados y clientes y más eficiencia en la organización.
Los empleados felices son más productivos, se comprometen más con la empresa, se ausentan menos de su puesto de trabajo e interiorizan como propios los valores de la organización. Cada aporte que se invierte en salud laboral tiene como respuesta un resultado de mayor eficacia en la empresa.
La contrapartida, malos resultados en empresas donde no se cuida este concepto
La no ejecución de medidas y políticas encaminadas a garantizar un mejor estado de salud laboral entre los empleados acaba no solo afectando a estos, sino también a la propia organización.
Las ausencias y bajas por enfermedad aumentan, la productividad disminuye y el sentimiento de identidad con la empresa se ve muy limitado. En España, por ejemplo, el Instituto Europeo de Psicología Positiva advierte que el estrés laboral provoca una de cada cuatro bajas. Este problema, muy vinculado a un bajo grado de salud mental, afecta a más de la mitad de la población activa y es el segundo motivo de baja médica, solo por detrás de dolencias musculares y óseas.
Los resultados económicos derivados de ese problema causan en España más de 25.000 millones de pérdidas por absentismo laboral y estrés. Y a esto hay que sumar lo que las empresas dejan de ingresar por la ausencia de sus empleados.
¿Por qué ocurren episodios de baja salud mental en los entornos laborales?
Son muchos los factores que están tras estas situaciones de incomodidad en el trabajo. Uno de ellos, que es muy importante, son las expectativas económicas insatisfechas. Las empresas mejor valoradas de manera interna son las que remuneran de manera justa y suficiente a sus empleados.
Unas condiciones salariales mejorables son un ápice importante para que exista falta de motivación. Pero esto también puede estar provocado por la ausencia de incentivos. A estos condicionantes se suman políticas inadecuadas de seguridad, prácticas ineficientes de comunicación, empleados que tienen un bajo nivel de decisión en la organización y bajo nivel de respaldo o apoyo a los empleados.
Son innumerables los motivos que pueden crear un clima de trabajo inadecuado, pues no hay que olvidar la carga excesiva de tareas a realizar, ritmos de trabajo muy acelerados, horarios laborales que impiden la conciliación o falta de aspiraciones.
¿Cómo pueden ayudar las empresas a revertir estas situaciones?
Las fórmulas mágicas para hacer frente a estos episodios no existen. La solución siempre pasa por aplicar principios de psicología empresarial que ayuden a toda la organización. A su vez, es vital atender las demandas de los empleados, desde las retribuciones salariales hasta su bienestar físico y mental en el puesto de trabajo.
Todo ello se puede lograr con una comunicación clara y precisa. Es aconsejable crear canales de comunicación bidireccionales, hacer a los empleados partícipes de las decisiones que se toman y tener en cuenta su criterio. De este modo se sentirán más valorados y comprenderán que son parte importante de la empresa.
El trabajo psicológico en este proceso es importante. Hakuna Psicólogos, que son Psicólogos en Medellín, son conocedores de esta realidad. Este centro terapéutico cuenta con profesionales altamente experimentados y tiene como una de sus principales áreas de actuación la psicología empresarial.
El centro ofrece talleres y convenios para empresas en los que aporta soluciones interesantes para recuperar un clima idóneo de trabajo. El objetivo es exprimir al máximo a los empleados, siempre desde su consentimiento y su satisfacción, para que la empresa y los propios trabajadores sigan creciendo.