
La vida de un autónomo en España

La vida de un autónomo en España es para algunos un riesgo muy grande y para otros una aventura lucrativa. La decisión no es sencilla, algunas veces es la opción más viable frente al desempleo, otras veces el inicio de un reto emprendedor. Algunos países favorecen esta actividad como Estados Unidos o Latinoamérica por ejemplo, otros colocan reglas que lo complican un poco más. Veamos al detalle cómo es la vida de un autónomo en España en su día a día.
¿Qué significa ser autónomo en España?
1. Tomar la decisión de registrarse como autónomo
Lo primero es darse de alta para convertirse en autónomo y empezar a tener los beneficios y obligaciones ejerciendo algún trabajo de forma independiente. Esto no tiene ningún costo, pues se trata de llenar unas planillas, pero si no entiendes cómo llenarlas siempre tienes la posibilidad de pedir asesoría. Como dato curioso en España, según un estudio presentado por Bankinter sólo el 9% del total de autónomos registrados son mujeres. Así que es una modalidad dominada por los hombres en España.
2. Ubicarse en centros urbanos
Aunque los autónomos en España pueden y se registran en cualquier parte del país, la mayoría se concentran en Madrid y Barcelona, aunque también hay un número interesante y creciente en Valencia, La Coruña, Sevilla y Alicante. Esto puede deberse a que más del 50% de los autónomos en España ejercen actividades profesionales que requieren de actualización constante y los centros universitarios y empresas para autónomos dentro del país crecen principalmente en estas zonas.
3. Buscan un estilo de vida libre y sin límites
Los ingresos son probablemente uno de los mayores atractivos de los autónomos españoles, ya que no tienen un límite o techo como los trabajadores dependientes. En su mayoría facturan menos de 100.000 euros anuales, pero aquellas actividades dirigidas a áreas tecnológicas y trabajos digitales bien organizados pueden facturar mucho más de 100.000 euros al año. También los trabajadores freelance disfrutan de su modalidad de trabajo la posibilidad de no tener jefe, la comodidad de tener un horario flexible y para muchos el agrado de poder trabajar desde casa.
4. Lo desaniman las cargas elevadas
Claro que las cargas sociales y administrativas son altas y esto puede desanimar a cualquier aventurero en sus inicios. Es necesario pagar una cuota fija de autónomo cada mes que está en 283,32 € al 2019 con la base mínima de 944,40 €. Sin embargo, cuando te das de alta como autónomo por primera vez puedes recibir bonificación. Por ejemplo, se puede tener beneficio de tarifa plana por dos años; durante el primer año se cancela 60 €, una cuota que se va incrementando con el pasar del tiempo, durante los siguientes 6 meses en un 50% y los último 6 meses en 30%. También por edad se reciben algunos beneficios si se tiene menos de 30 años los hombres y 35 años las mujeres. Los autónomos societarios deben pagar una tarifa más alta. Además, se deben pagar las cuotas fiscales de IRPF (Impuesto Sobre la Renta) y el IVA (impuesto al valor añadido) que está en 21%.
Cuéntanos tus experiencias como autónomo en España.